Todos aquellos que tienen que esperar varias horas en una sala de espera, por una salida en un aeropuerto o en una terminal de autobuses, saben lo tedioso que puede ser, yo tenia la costumbre de buscar una mesa tranquila en un restaurant, comer una botana y ensamblar un modelo en lo que llegaba la hora indicada.
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| Mi tiradero en una mesa de la sala de espera de la Central de Autobuses de San Luis Potosi |
Pero esa costumbre se ha tenido que modificar, ahora ya no se puede subir a un avion con unas tijeras o una botella de pegamento o pintura, asi que no me ha quedado otra, que ya no usar avion; mas que como ultima instancia, o para lugares donde llegar por carretera equivale al suicidio.
Pero por autobus uno puede conservar sus costumbres, asi que cuando viajo, me llevo un par de aviones, y un equipo de viaje de modelismo, unas tijeras plegables, una lima de uñas de carton, unas cuantas ligas, pintura acrilica, pegamento blanco, los menos posibles botes de pintura para modelismo, un par de pinceles y un tubo de pegamento.
Usualmente en mis viajes solo me da tiempo de ensamblar y pintar dos modelos, suelo llevar dos muy semejantes, para poder aplicar el mismo esquema de pintura y no cargar demasiados botes de pintura o pinceles, asi a este viaje a San Luis Potosi, me lleve dos Phantoms ingleses.
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